Como músico me gustaría hablar un poco de lo que sé y de mi experiencia como baterista, la cual he podido disfrutar, podría decirse casi ya por 20 años, aunque son 10 practicándola activamente.

Cuando tenía 12 o 13 años aproximadamente recién había entrado en la secundaria y durante esos días en lo que llegaba a casa después de medio día me encontraba con la situación de que estaba solo en casa, pues, mis hermanos estaban con mi abuelita y mi madre iba a trabajar, mi padre igual trabajando y él era el que pasaba por mis hermanos hasta las 7 de la tarde cuando llegaba. En ese tiempo recuerdo que desarrollé algunas habilidades como ser mejor estudiante, ya que me gustaba hacer la tarea y tener todo en orden, de hecho, mis calificaciones y demás se daban porque me entretenía haciendo las tareas y eso ocasionaba que me supiera las respuestas en los exámenes, era habitual salir en el cuadro de honor cada bimestre.

Después de eso descubrí un video mix de un anime que venía acompañado de una canción que me gustó y me puse a investigarla y descubrí a la banda Linkin Park que eran los protagonistas de la canción, y a partir de ahí empecé a escuchar a la banda descargando su música y videos para mi computadora y con el tiempo fui desarrollando con ayuda de simplemente imitar los ritmos, coordinación en mis pies y manos al punto de que conforme pasaban las semanas me iba haciendo mejor, para esto, no sé exactamente cuanto tiempo pasó, talvez años para sentir que ya podía hacer casi cualquier cosa, y considero que la paciencia y el simple gusto sin presión me fueron dando la perseverancia para ir mejorando cada vez. En lo personal creo que eso fue clave para que yo no me desesperara o desistiera, ya que sin darme cuenta fue emocionante como iba conociendo otros tipos de bandas que tocaban muy bien e iba aprendiendo nuevas cosas y expandiendo mi imaginación y habilidades, puesto que el oído se me desarrolló de igual manera para reconocer y distinguir las diferentes partes cuando sonaban junto con guitarras, bajos y voces principalmente.

Creo que hubo varios momentos clave, el primero de ellos fue cuando comencé en un ritmo lento meter bombo a destiempo, recuerdo muy bien que practicaba y practicaba y no veía mejoras, pasaba que me iba a hacer otra cosa, dormía y al día siguiente volvía y de repente se me hacía más fácil, en ese momento de hecho aún no podía ni de chiste pensar en jugar con la apertura y clausura del hit hats o contratiempos porque eso era el siguiente nivel. Después con alguna otra canción y alguna otra banda empecé a practicar una vez que empecé a dominar bombo y la caja con tiempos normales de contras, los destiempos y contras, abrirlos cerrarlos y recuerdo con mucha gracia que eso para mí fue muy emocionante, sentí una vez que movía todo que podía hacer cualquier cosa. Ya después había canciones que se me hacían más fáciles y había otras que se hacían posibles e iba por ellas. Fue una etapa muy emocionante y divertida, y a la fecha sigo tocando en la iglesia a donde asisto. Cabe destacar que tomé por primera vez una batería real hasta la edad de 21 años aproximadamente, pero lo hice ya sabiendo hacer de todo. Esta segunda parte lo dejaré para otra nota. Por lo que concierne a esta, solo quiero destacar 3 aprendizajes que obtuve al respecto.

1. Todo se vuelve cuando más fácil cuando te gusta, sin embargo, hay cosas que, aunque no te gusten, tienes que pasar por el mismo procedimiento de la constancia
2. Errar es la clave. Para hacerlo mejor el error será necesario porque las retroalimentaciones te ayudarán a crecer, incluso (talvez lo escriba en alguna otra publicación) hay algo en tu cerebro, algún factor mental que cuando erras y no puedes hacer algo y te relajas, en otro instante eres capaz de hacerlo porque tu cerebro como que sigue desarrollando esa parte, aunque no estés activamente haciéndolo.
3. La repetición hace al maestro. ¡Inténtalo, inténtalo y vuélvelo a intentar! A veces nos frustramos porque queremos hacerlo a la primera, a la segunda o a la tercera y no es así. La realidad es que requiere de mucho tiempo y de muchos intentos y repeticiones, por lo cual desde luego algo sencillo no es.